Anexada recientemente a la Reserva de la Biósfera de Calakmul, la Reserva Estatal de Balam Kin es un mosaico de paisajes naturales tan puros como frágiles. Su clima, el suelo y las formaciones de agua, permiten la convivencia de diferentes tipos de selva donde crecen especies como el guayacán, cedro, caoba, palo de tinte, orquídeas, bromelias, granadillo, chechén entre otras. Los caminos son puras brechas abiertas años atrás por madereros y chicleros.
Su rica fauna incluye anfibios, reptiles, aves y mamíferos. Cinco de los seis felinos que viven en México, están en Balam kin: el jaguar, el ocelote, la onza, el tigrillo y el puma. Además monos aullador y araña, venados, pavos ocelados, el tucán, el zopilote rey, la perdiz canela, el aguililla gris y el halcón entre otros. Biodiversidad en su máxima expresión.